Este tratamiento se basa en la combinación del ácido hialurónico y la mesoterapia.

 

Los rellenos con ácido hialurónico

El ácido hialurónico se encuentra de forma natural en nuestro organismo, aunque con la edad disminuye su síntesis y aumenta su degradación. Los principales resultados que se obtienen tras dicho tratamiento son:

• Rellenar: por lo que resulta muy eficaz para tratar surcos nasogenianos muy marcados, arrugas alrededor de la boca, surcos en mejillas, líneas de marioneta, etc.

• Aportar volumen en las zonas en las que, con el paso del tiempo, se va perdiendo: arco zigomático, fosa temporal, pómulos, labios, mentón.

• Retener agua en los tejidos donde se encuentra el ácido hialurónico natural, lo que resulta muy conveniente, ya que una piel hidratada es propia de una piel joven y/o bien cuidada.

 

Clínicamente, el efecto visible es el de una piel más tersa y firme. Por tanto, el ácido hialurónico es uno de los tratamientos más eficaces con los que contamos, tanto para reparar los signos del envejecimiento, como para mejorar algunas de nuestras facciones o perfilar contornos que, con los años, van desdibujándose.

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La Mesoterapia Facial es una buena manera de incrementar la eficacia de los principios activos presentes en un cosmético, porque los introducimos con una aguja dentro de la piel.

 

Existen evidencias científicas de que sustancias como la vitamina A, la vitamina C o el ácido hialurónico aplicados tópicamente son eficaces en la lucha contra el envejecimiento de la piel. Si estas mismas sustancias son inyectadas, su efecto será mucho mayor.